«¡Soy un impostor!; ¡No me corresponde estar aquí!»

La autoestima -alta o baja- tiende a generar profecías que se cumplen por si mismas.

Recuerdo esta frase que ha traído una chica a mi consulta, donde se estaba planteando la necesidad de realizar un cambio profesional en su vida, pero la falta de titulación en España vulneraba su seguridad hacia las aptitudes y capacidades necesarias para cumplir su objetivo profesional.

Su proceso de autosabotaje la ubicaba en una situación que no era real, por el contrario no se sentía lo suficiente capaz para hacer frente a ello: “esto es demasiado bueno para ser verdad”.

Hemos escuchado muchas veces la palabra autoestima y en proporción hemos oído hablar de ella de una u otra manera. También nos hemos enfrentado a este término de manera vivencial. Pero a que se refiere en general?

Generalmente entendemos concepto de autoestima como el estado de ánimo que nos afecta tanto positiva como negativamente.

La autoestima es una necesidad humana fundamental. Es lo que necesitamos para funcionar eficazmente. No queremos agua y comida, simplemente las necesitamos, son unas de las necesidades básicas que tenemos que satisfacer en nuestro día a día.

Lo mismo ocurre con la autoestima, si no tenemos cubierta esta necesidad de tener una autoestima alta, estaremos en déficit ante algunas situaciones que nos encontremos, y este déficit perjudicara nuestra forma de actuar.

Decir que la autoestima es una necesidad es decir lo siguiente:

  • Que proporciona una contribución esencial para el proceso vital.
  • Que es indispensable para el desarrollo normal y saludable.
  • Que tiene valor para la supervivencia.

Pero no me quiero detener en este solo concepto, sino hacer hincapié en uno más: La Ocupabilidad.

Entendemos la ocupabilidad como la probabilidad con la que se encuentra un aspirante a ocupar un puesto de trabajo en el entorno laboral que le es propio.

Para llegar a ocupar este puesto es necesario estar preparado y trabajado a nivel personal; y ahí es donde entra en juego nuestra autoestima.

¿Cómo presentarme a un puesto de trabajo o a un cambio laboral cuando no puedo reconocer mis recursos personales como propios y auténticos?

Una de las primeras desventajas con las que se encuentra un candidato en una entrevista laboral es su baja autoestima, es en este momento donde se encuentra con uno de sus primeros conflictos, no tener su autoconcepto bien fortalecido, reconocer como propias sus competencias y poder hacer uso de sus habilidades y actitudes.

Detente y piensa por un momento cuales son las herramientas que has ido adquiriendo durante tu proceso profesional y de qué manera has hecho frente a tu o tus puestos de trabajo. Este es un dato que te puede ser de gran utilidad para encontrar los recursos necesarios que necesitas en este momento.

Si renuncias a tirar de tu experiencia es ahí donde sueles sentir que eres un impostor, llevando adelante un proceso de autosabotaje y como resultado ver como no llegas a tus objetivos, no puedes mirarlo de forma constructiva, sino que acabas en una creencia errónea pensando que eso es lo que te merecías o que ya de antemano sabías que te iba a pasar.

Intentemos entender que diferencia existen en la autoestima:

Una Baja Autoestima:

  • Insatisfacción con uno mismo
  • Sensibilidad ante la critica
  • Indecisión por miedo a equivocarse (no se permite el error)
  • Complacer a los demás
  • Perfeccionista y autoexigente
  • Culpabilidad y magnificencia de los errores
  • Irritabilidad con facilidad incluso por cosas de poca importancia
  • Tendencia a la defensiva
  • Persona negativa

Una Alta Autoestima:

  • Cree en sus valores y principios
  • Actúa confiado en su propio juicio
  • No pierde tiempo en preocupaciones pasadas o futuras
  • Confía en su capacidad resolutiva ante los problemas
  • Reconoce diferencias ante los demás
  • Se considera una persona valiosa en su entorno
  • No se deja manipular por otros
  • Reconoce sus sentimientos negativos y positivos
  • Disfruta de una gran variedad de actividades
  • Es sensible a necesidades de otros

Una persona con una autoestima baja, tomara su situación de desempleo como una consecuencia negativa a su falta de compromiso imaginaria, ya que cree que él es el causante de su situación actual, no puede permitirse vivir conscientemente el hecho de que en realidad su situación de desempleo es debido a la precariedad de él mismo en la actualidad.

De esta manera, no es sencillo optar a un nuevo puesto de trabajo, ya que se siente culpable de su estado actual, y esto se correlaciona con la irracionalidad y la ceguera ante la realidad, con el miedo a lo nuevo y a lo desconocido.

Por esto es importante que puedas subir tu autoestima, no por el hecho de que nos haga sentir mejor, sino que nos permite vivir mejor, responder a los desafíos y las oportunidades con mayor ingenio y de forma más apropiada.

El respeto a uno mismo es el fundamento del respeto de los demás.

¿Por dónde comenzar?

Por construir nuestra autoestima, que puedas ver y creer cuáles son tus capacidades, competencias, aptitudes y actitudes, y así poder enfrentarte a tu reto personal, tu nueva situación de manera más integra.

No es necesario que te mientas o te boicotees antes esta situación, sino que por el contrario busques, analices y hagas hincapié en tus capacidades.

Me gustaría darte una tarea que puede resultarte interesante y conocerte un poco mejor. Hazte una lista de elogios, diez elogios que hayas recibido alguna vez en tu vida; luego los puntúas de 1 a 10, siendo el 1 el que menos te crees y 10 el que más. Y luego que pienses como serías tú si te creyeras un punto más este elogio, al cumplir tu objetivo, (búsqueda de empleo, cambio profesional, frente a unan entrevista, etc.)

Si ves que no puedes encontrar elogios en ti, puedas hablar con tu amigo/a o con una persona de tu confianza para que te ayude a rebuscar y encontrarlos, porque seguramente los tienes, y de esta manera poder afianzarlos en ti para volver a coger las herramientas que te ayudaran en tu nuevo camino profesional.

Trátate con amor, dite a ti mismo que tienes algo para dar; que no estás atrapado en este sentimiento de carencia. La confianza en tu capacidad, en tu valía, son las que te acompañarán y te reafirmarán en tu camino.

En este sentido creo que es nuestro trabajo como docentes es poder brindarte las herramientas necesarias para que puedas abordar los cambios necesarios a nivel interno para hacer frente a tu ocupabilidad.

Walter Chiaverano

Formador – Terapeuta Holístico

Uno siempre está creando sus circunstancias.

Toma una idea. Conviértela en tu vida: piensa, sueña y vive según esa idea. Permite que tu cerebro, músculo, nervios y cada parte de tu cuerpo se llene de esa idea y descarta cualquier otra. Esta es la manera de ser exitoso.

Swami Vivekananda 

¿Cuántas veces has escuchado, no sirves, no puedes, no tienes el valor, no lo lograras, etc., a diferentes cosas o ámbitos de tu vida?, sea lo que fuere que te digas, la primera impresión casi siempre es de juicio; siempre hay algo en ti que está básicamente mal.

Estas son las cosas que nos condicionan en nuestro día a día, más allá de la edad que tengas te das cuenta que sigues conviviendo con ello, no dejan de ser creencias erróneas que nos condicionan como adultos y que tienen un poder sobre nosotros que muchas veces cuando lo vemos no damos crédito de ello.

Esto lo tenemos instaurado en nuestras creencias erróneas, desde muy temprana edad, donde ha generado un poder sobre nuestro niño interior que nos desconecta de nuestra autenticidad y de nuestra energía vital.

Hemos aprendido a convivir con ello y a hacernos cargo de nuestro presente a través de estas creencias erróneas.

No te pongas esto o aquello porque no va con tu personalidad, cuando en realidad no vivimos nuestra personalidad de manera libre y auténtica, sino condicionada por esas creencias erróneas condicionadas por esa voz adulta que hemos aprendido a escuchar y a obedecer.

Pero cuando por fin conectas con esa parte sana de tu ser, es cuando puedes utilizar tu energía vital para crear las circunstancias de tu elección.

Para ello tenemos que dejar que se activen dos principios fundamentales en nosotros, que tiene que ver con el poder creativo universal y que nos conecta con nuestra energía vital; la activación y el permitir que las cosas sigan su curso.

Como individuos hemos ido desarrollando habilidades para no conectar con nosotros mismo, que no nos permite darnos cuenta que tenemos que cambiar algo, para no sentirnos impotente hacia el objetivo que queremos alcanzar.

Vivir tu vida según tus criterios, te suele conectar con el miedo, y el miedo suele tener muchas capas, una de ella es la existencial que tiene que ver con el miedo de ser mortales y enfrentarnos a la muerte, el miedo que surge de esa increíble vulnerabilidad que no podemos eliminar o ignorar. 

Cuando estamos bien con nosotros mismos podemos enfrentarnos a esa verdad con confianza, con gracia e incluso con entrega.

Para enfrentarnos con ese miedo tenemos que sanar nuestra vergüenza. La vergüenza nos roba el poder y la claridad para enfrentarnos la incertidumbre de la vida y nos roba también la habilidad para vivir la vida con totalidad, coraje y alegría, de forma amplia y creativa.

¿Por qué está nuestro niño interior tan empobrecido y aterrado? ¿Por qué huimos de nosotros mismos de forma tan eficaz y tan compulsiva? Es porque estamos llenos de vergüenza y enfrentarla es doloroso.

Cuando hablamos de cambio, nos lleva a conectarnos con nuestra energía vital, que es la que nos permite conectar con nuestro auténtico yo y vivir satisfactoriamente con lo que tenemos y conectar con los dos principios que he comentado anteriormente.

Cuando hablamos del principio de activación, hacemos referencia al esfuerzo y la perseverancia, implica buscar aquello que nos molesta o que queremos cambiar, y ponernos en movimiento hacia el objetivo, entender cuál es la causa que nos ha llevado hasta ahí y quitar los obstáculos que no nos permiten resolver esta situación.

Este es el principio masculino, que tiende hacia el exterior y conduce a acciones generadoras de consecuencias.

El principio de permitir que las cosas sigan su curso, también hacer referencia a un movimiento, pero este movimiento es interno, es una espera de paciencia y confianza, donde permitimos que el proceso madure hasta fructificar.

Este es el principio femenino, dejar que las fuerzas activadoras funcionen como deben de hacerlo.

“Imagina por un momento que una semilla cae de un árbol en un parque, en un campo o en algún lugar al aire libre, en busca de un sitio donde poder empezar a germinar…

El viento le da la energía para activar el proceso, y es en ese preciso instante en donde la semilla cae depositada en una grieta que tiene la tierra, es ese lugar el que estuvo buscando para poder cumplir su objetivo. Y es ahí en su sitio donde se encuentra, quieta he inmóvil en ese pedacito de terreno fértil.

Mientras van pasando los días está aparentemente inmóvil, pero en movimiento, porque todo lo que está vivo debe moverse. Y es que la misma naturaleza ha ido cubriendo con un poco mas de tierra del terreno que erosionado por el tiempo hace que esta semilla actúe desde su energía vital.

Los días pasan y el proceso va pasando por los diferentes cambios que son necesarios para que pueda cumplir su objetivo. Es movimiento puro y natural.

Y la semilla comienza a germinar y a transformase en su tiempo y en su momento en ese árbol al que quería llegar a ser y cumplir su objetivo”.

Aquí podemos ver como funcionan los dos principios:

Activación:

La naturaleza misma se pone en movimiento, a través del viento hace que la semilla caiga del árbol, se mueva hacia la grieta del terreno, determina que se quedará ahí ya que es donde va a crecer y le da las condiciones óptimas para ello.

Permitir que las cosas sigan su curso:

En el momento que la semilla se fija al terreno, se cubre de tierra y se nutre de la naturaleza misma, es el tiempo, la paciencia y la confianza, permite que el proceso madure hasta que de su fruto.

Con estos principios conectamos con nuestra energía vital, que si lo hacemos de manera destructiva estos principios trabajaran en conjunto, pero lo hacen de manera distorsionada e incomprendida.

Pero si lo hacemos de forma constructiva, los principios actúan de manera armoniosa y se complementan.

Al relacionarnos de forma sana con nosotros mismo, vamos creando circunstancias de auto-realización, auto-afirmación y autonomía.

Si ves que no llegas a tu objetivo, no cambies el objetivo, cambia el plan”.

Ya no necesitamos la aprobación del adulto que teníamos dentro aprobando o desaprobando nuestros criterios, sino que nos comenzamos a convertir en adultos que no necesitan la aprobación de nuestras acciones, sino que podemos vivir en libertad y armonía con nosotros mismos.

Walter Chiaverano

Terapeuta HolísticoTerapeuta Gestalt

Las relaciones de pareja.

No sabemos si darnos la vuelta a lo que nos resulta conocido pero aterrador, o seguir adelante hacia lo que quizás sea aterrador por ser desconocido.

Yong Mingur Rimpoche

Actualmente estamos atravesando una pandemia mundial que nos ha cambiado, de una forma u otra anhelamos volver a la normalidad, cuando esta normalidad de la que hablamos ya no es la misma, sino que nos enfrentamos a una nueva realidad.

Han sido muchos días, los que hemos estado encerrados, solos o en compañía, pero nos hemos tenido que encontrar con nosotros mismos y con los otros.

¿Qué son las relaciones?

Es un estado donde aprendemos de los otros y de nosotros mismos, donde uno pude crecer y puede expresarse sin tabúes.

¿Pero que pasa en las parejas?

Actualmente estoy recibiendo llamadas de parejas donde este confinamiento, mas que juntarlos, los esta separando o llevándolos al planteo de la separación.

Cuando hablamos de relación de pareja, estamos hablando de dos seres humanos que están tratando de relacionarse de manera sana o insanamente posible.

Si bien el relacionarse, como he dicho anteriormente, tiene que ver con un aprendizaje mutuo, que nos permita un crecimiento, y donde nos sintamos seguros de que podemos hablar y expresarnos de tal manera, que no me sienta juzgado ni desvalorizado por lo que tengo que contar o decir, muchas veces esto esta en juego debido a los miedos de encontrar en el relacionarme lo que menos nos gusta de cada uno.

No somos victimas de lo que sucede en nuestra pareja, sino que somos co-creadores del estado actual de nuestras relaciones. Si actualmente vives en una relación de pareja conflictiva, te has preguntado:

¿Es tu responsabilidad por haber escogido, por seguir a semejante pareja?

¿Cómo has llegado a este estado de relación?

No es una cuestión de búsqueda de culpables, sino un acto de valentía y de reconocimiento de cual es tu responsabilidad en esta situación.

Entendemos por pareja, el tipo de relación donde se vibra vitalidad, armonía, placer, comunicación profunda y ligera al mismo tiempo, aceptación completa de la otra parte, sin tener la necesidad de cambiar a la otra parte, encontrar que las diferencias son retos donde hay que superar de manera conjunta.

Entonces, ¿cómo pasamos de donde estamos a donde queremos estar?

En última instancia la capacidad de amar siempre se resume a la voluntad interna y a la disposición para hacerlo.

 Si te escondes de ti mismo, y no haces frente a la realidad que estas viviendo, no estas haciendo nada que no sea diferente a lo que vienes haciendo hasta la actualidad.

Pero si te das cuenta de que parte de la responsabilidad de tu situación actual es tuya, ya has comenzado a hacer algo diferente.

“Las relaciones de pareja, son como dos niños inconscientes, cada uno con sus miedos, sus necesidades insatisfechas, sus exigencias y expectativas interactuando entre si crean un autentico caos”

Krishnananda

Afrontar el miedo, es cuidar al niño herido que has sido, es hacerte cargo de ti mismo, y desde este lugar poder amar sin miedo a la herida.

Walter Chiaverano.

Terapeuta Holístico – Terapeuta de parejas